Foto: World Snooker Esta semana se está jugando en Beijing el China Open de snooker. Es un torneo importante ya que es el último antes del mundial y además hay una plaza directa para Sheffield en juego, la cotizada plaza número 16, esa que separa Ponds Forge y sus tres rondas de clasificación de la gloria del Crucible Theatre. Uno de los jugadores que lucha por esa plaza es el galés Mark Williams, que necesita ganar el torneo para conseguirlo. Esta mañana jugaba contra John Higgins. John Higgins es el jugador por el que me enamoré del snooker, el jugador con el que disfruto y sufro por igual en cada partida. Con él he compartido a través de la tele o de mi portatil tantos momentos de felicidad y frustración. Después de él están Willo, Ronnie y Bingham (en este orden) pero mi número 1 siempre será John, el mago de Wishaw.